Magneto lee (y admira cada vez más):
"Sé que en algún rincón de mí, hay un diablo que no puede morir. No me hace falta un oído aguzado para las torturas refinadas ni tampoco el sentido del gusto para el vinagre de la sangre, sino solamente el silencio sordo que presagia un quejido prolongado. Entonces reconozco el peligro. Y si me vuelvo hacia el Mal despótico y envilecedor, sube por los aires, al cerebro, a las paredes, divinidad súbita, severa y destructora.Estás inmóvil y esperas. Te estás esperando. Pero ¿qué vas a hacer contigo? ¿Qué te vas a decir, rodeado como estás de tanto no-decir?¿Qué pasa a través del silencio? ¿Quién pasa? Es tu mal que está pasando a través de ti, fuera de ti, es una omnipresencia de tu misterio negativo.¿Piensas en lo que quieres ser? Tus pesares no tiene futuro. Ni ningún futuro es tuyo. En el tiempo ya no tienes cabida; en el tiempo yace el horror.Y entonces te vas. Al marcharte te olvidas. Y en tu caminar eres otro y siendo, ya no eres."
"Breviario de los vencidos" - Émile Cioran
No hay comentarios:
Publicar un comentario